El amor profundo de Śrī Rādhā por Śrī Kŗșņa era evidente por sus numerosos síntomas. Cuando Jațilā se enteró de eso, ella se volvió cada vez más ansiosa. Un día ella llamó a su hija Kuțilā y le habló en privado. "Escucha, mi hija querida, yo no puede proteger a Rādhā contra ese Kŗșņa. ¿Que haremos? (1)
O Kuțilā, tengo una solución. De alguna manera, debemos evitar que Rādhā salga de la casa por alguna razón, y al mismo tiempo, por cualesquier medio, debemos evitar que ese Kŗșņa entre en nuestro hogar. Tu debes estar completamente alerta." (2)
mātar bhavatyā na vadhūr niroddhuḿ Śakyā yataḥ pratyaham eva yatnāt Vrajeśvarī bhojayituḿ sva-putraḿ pākārtham etāḿ nayati sva-geham (3)
Al escuchar las palabras de su madre, Kuțilā respondió, "madre, no es posible vigilar los movimientos de su nuera. Cómo podemos evitar que salga de la casa, cuando cada día sin falta, Vrajeśvarī Śrī Yaśodā la invita para cocinarle a Su hijo?" (3)
putri! tvam adya vraja tāḿ vadaitan nātaḥ paraḿ kvāpi vadhūḥ sva-gehāt prayāty atas tvaḿ suta-bhojanārthaḿ pāke niyuktāḿ kuru rohiņīḿ tām (4)
"Hija," Jațilā contestó, "ve con Vrajeśvarī, y dile que a partir de hoy, mi nuera no saldrá de nuestra casa para ir a dondequiera. Dile a Vrajeśvarī que ella pueda ocupar a Rohiņī para que le cocine a Su hijo." (4)
mātas tayā vakșyata eva tasyai durvāsasā ko ’pi varo vitīrņaḥ tvad-dhasta-pakkaudana-bhoktur āyuḥ nirvighnam astv ity adhikā prasiddhiḥ (5)
Kuțilā replicó, "pero madre, Vrajeśvarī seguramente dirá, `A Śrī Rādhā le ha sido concedido un favor tan extraordinario por Durvāsā Muni que no puede ser descrito en palabras. Cualquiera en Vraja-maņḍala sabe que debido a este favor, los que comen de lo que cocina Śrī Rādhā tienen una larga vida y todos sus obstáculos son destruidos.' (5)
"Vrajeśvarī continuará, ` Kŗșņa es mi unico hijo. Alimentarse de lo cocinado por Rādhā le permite permanecer fuerte y libre de los obstáculos creados por los demonios traviesos. Esa es la razón por la que intento asegurarme de que a diario Èl coma el alimento cocinado por su mano."¿Cuando ella se exprese de esta forma, cómo debo contestarle?" (6)
"Oh hija," dijo Jațilā, "tu debes decirle a Vrajeśvarī: ` y que pasa si los mejores sabios vienen mañana, o al día siguiente, y bendicen a Rādhā a tener el don de a quien ella toque tenga vida larga? Entonces ¿que sucedería? ¡Dimelo! (7)
kiḿ sparŚayantī nija-putram etām ākārayișyasy ayi nīti-vijṣe! kulāńganā yat para-veŚma gatvā nityaḿ paced ity api kiḿ nu nītiḥ (8)
"`O Vrajeśvarī, quien es erudito en etica, entonces ¿llamaría a Rādhā para que fuese a su hogar y tendría que tocar a su hijo? Y otro cosa: que clase de código moral indica que puede cualquier muchacha bien educada ¿diariamente ir a la casa de otro hombre a cocinarle?(8)
vadhvāḥ kalańkaḥ pratideŚam eșa bhūyān abhūd yat kim u sahyam etat sneho yathā te nija-putra evaḿ sneho mamāpy asti nija snūșāyām (9)
“La mala reputación de mi nuera se ha extendido a traves de Vraja. ¿Cómo puedo tolerar eso? ¿No tengo tanto afecto para mi nuera como usted lo tiene para su hijo?“(9)
"Tu debes contestar: ` Ahora que usted ha oído mis razones no debe enviar a mi nuera a su casa. Si usted continua resuelta en alimentar a su hijo con el alimento que Rādhā ha cocinado, entonces envíe a Dhanișțhā a mi casa tres veces al día para traer el modaka, laḍḍu y otros dulces que ella ha hecho para Él.' (10)
evaḿ nirodhe sati tau vișaņņau parasparādarŚana-dāva-tāpitau babhūvatur hanta! yathā tathā svayaḿ sarasvatī varņayituḿ kșameta kim (12)
“Explicale todo a Vrajeśvarī. Si ella se enfurece, nosotros saldremos de su ciudad y nos mudaremos a otra parte. Haré cualquier cosa para salvar a mi nuera de ese hijo licencioso suyo. ” Despues de esta discusión, Jațilā y Kuțilā confinaron a Śrī Rādhā en su casa para frustrar cualquier ocasión de reunión con Śrī Kŗșņa. ¡Ay!, ni Sarasvatī, la diosa del discurso y de la erudición, podría describir el dolor de la joven pareja, que se consumía por el fuego forestal de no poderse ver. (11-12)
Para extinguir el fuego ardiente de Śrī Rādhā por la separación de Śrī Kŗșņa, las sakhīs Les hicieron una cama refrescada por pétalos de loto untados con una pasta de alcanfor y sándalo. Sin embargo, cuando Śrī Rādhā tocó esa cama, los pétalos se marchitaron y se secaron inmediatamente con el calor de su cuerpo febril. (13)
¿Cómo Śrī Rādhā podría pasar las veinticuatro horas sin ver a Śrī Nanda-nandana-nandana? Ella no puede tolerar incluso los momentos cuando sus párpados centellean y su visión de Él se obstruye. Ella condena a Brahmā, el creador, por concebir los párpados, y ruega para nacer como un pescado que tiene ojos que nunca se cierran. Śrī Rādhā cayó inconsciente en la cama de flores, incapaz de ver u oír cualquier cosa. Cuando, por la orden de Vrajeśvarī, Dhanișțhā llegó allí, ella vio la condición ardiente de Śrī Rādhā por la separación de Śrī Kŗșņa. (14-15)
adya prabhāte lalite papāca Śrī-rohiņī kŗșņa-kŗte yad annam tat prāŚya so ’gāda vipinaḿ vrajeśā māḿ prāhiņod atra vișaņņa-cetāḥ (16)
“O Lalitā,” Dhanișțhā hablo, “Esta mañana Śrī Rādhā no vino a cocinar a Śrī Kŗșņa, Así que Śrī Rohiņī Le cocinó en su lugar. Despues de desayunar, Él llevó a pastar a las vacas. Vrajeśvarī pudo ver que Kŗșņa no comió con el mismo gusto que Él generalmente lo hace, de tal manera que su corazón extremadamente se entristeció y me envió aquí. (16)
sāyaḿ rajanyām api yat tathā śvaḥ sa bhokșyate tasya kŗte ’ham āgām iyan tu saḿjṣā-rahitaiva paktuḿ kathaḿ kșametādya karomi hā kim (17)
"He venido a conseguir modaka y otras preparaciones para que Śrī Kŗșņa coma esta noche y tambien mañana por la mañana antes de que Él lleve a las vacas a pastar. Pero, oh!, ¿Cómo puede Śrī Rādhā hacer los dulces en esta condición inconsciente? Oh querida, ¿que hare ahora?" (17)
kŗșņaḥ puras te kalayeti tad-vāk tāḿ bhagna-mūrcchām akarod yadaiva tadā dhanișțhā sahasā vrajeśā- sandișțam āha sma saroruhākșīm (18)
kațāha mātrānaya rūpa-maṣjari! pralipya cullīm iha vahnim arpaya yathā vrajeśādiśad evam eva tat kŗșņasya bhakșyaḿ kila sādhayāMi aham (19)
Incapaz de ver otra solución, Dhanișțhā se acerco a Śrī Rādhā y con voz alta hablo en Su oído: “O Rādhā tan solo mira; Śrī Kŗșņa está parado ante Ti”. Tan pronto como estas palabras entraron en Sus oídos, la de ojos de loto, Śrī Rādhā, recuperό su conciencia. Dhanișțhā le mencionό que Vrajeśvarī le había enviado para pedirle a Rādhā preparar modaka y otros dulces para Kŗșņa.
Aunque Śrī Rādhā estaba ardiendo en el fuego de la separación de Kŗșņa, tan pronto como Ella escucho la petición de Vrajeśvarī de labios de Dhanișțhā, una abundante energía de pronto entrό en Su cuerpo. “Rūpa Mañjarī,” Ella dijo, “rápidamente prepara la estufa y enciende el fuego. Trae el pequeño pan, y Haré todas las preparaciones que Vrajeśvarī desea para Śrī Kŗșņa. (18–19)
“Sakhī, hoy haré cuatro veces la cantidad de modaka y otras delicias que usualmente hago. No te preocupes en lo mas mínimo por Mi salud”. Con estas palabras, Śrī Rādhā se sentó apropiadamente frente a la estufa. (20)
Que asombroso! Un momento antes la cama de pétalos de Śrī Rādhā se marchito y seco con Su toque ardiente, pero ahora, cuando Ella hace dulces para su amado, las flamas de la estufa enfrían su cuerpo. (21)
premottamo ’tarkya-vicitra-dhāmā yato janaḿ tāpayate śaśāńkaḥ vahniḥ punaḥ Śītalayaty atas taḿ tad-āśrayaḿ vā kim u ko ’pi vetti (22)
La más elevada morada de prema posee un asombroso e inconcebible poder, en la cual la refrescante luna puede radiar un calor abrasador y el fuego pude refrescar. Como puede alguien que ha tomado el refugio de tal prema siempre ser entendido?
Śrī Lalitā entonces dijo: “Oh Dhanișțhā, una lluvia abundante no caería de las nubes llenas de relámpagos? La fresca nube de lluvia [Śrī Kŗșņa] incrustada con la enredadera de relámpagos [Śrī Rādhā], no saldría mas? Si esta nube de lluvia no aparece, no habría muestra de rasa, y la cosecha de bienaventuranza estática de las sakhīs se marchitaría y totalmente seria destruida.” (23)
bravīși satyaḿ lalite vayasyaiḥ saha svayaḿ sīdati so ’pi kŗșņaḥ vŗndāvana-sthāḥ śuka-keki-bhŗńga mŗgādayo’py ākulatām avāpuḥ (24)
“Lo que dice es verdad,” Dhanișțhā contesto. “Śrī Kŗșņa and Sus sakhās estan sufriendo el mismo dolor que las sakhīs de Śrī Rādhā. Que mas puedo decir? Aun el venado, los pavo reales, los pericos, los abejorros y las otras criaturas de Vŗndāvana estan afligidas por esta gran congoja.” (24)
hā kiḿ viśākhe! kim u rodiși tvaḿ rādhāḿ dadaḿśāhir alakșya-rūpaḥ kathaḿ kva vā koli-tale tadīya- ratne gŗhīte nija-ratna-buddhayā (26)
Cuando Śrī Rādhā termino de hacer los dulces, Se los dio a Dhanișțhā. Dhanișțhā susurro algo a lo oídos de Śrī Rādhā, Lalitā y las otras sakhīs, y entonces regreso a la casa de Nanda Mahārāja. Esa tarde Viśākhā fue con Jațilā y en su presencia, hizo una muestra de lamento por dolor y rodando por el suelo. Viéndola en tal estado, Jațilā preguntó, “Viśākhā, porque estas llorando?” “Śrī Rādhā ha sido mordida por una serpiente negra. Ella no la vio,” Viśākhā contestó con lágrimas. Notablemente perturbada, Jațilā respondió, “Donde sucedió? Como la mordió?” “La serpiente estaba oculta bajo un árbol badrī,” sollozando Viśākhā. “Śrī Rādhā malentendió la joya sobre su cabeza como la suya propia. Cuando Ella alcanzó la joya, la serpiente mordió su mano.” (25–26)
“Oh, no! Estoy condenada!” Jațilā se lamento. “Un rayo a golpeado mi cabeza.” Sollozando, corrió hacia la recamara de Śrī Rādhā donde Rādhā yace temblando en el suelo. Cuando Jațilā vio a su nuera en ese estado, ella lamentándose en voz alta y golpeando su pecho con ambas manos en angustia. (27)
gavāḿ gŗhād ānaya putri! tāvat sva-bhrātaraḿ śīghram itaḥ prayātu sa māntrikān ānayatu prakŗșțāḿs te me vadhuḿ nirvișayan tu mantraiḥ (28)
Jațilā llamo a Kuțilā, “Rápidamente, hija mía, corre al establo. Dile a tu hermano que traiga a una persona que conozca del arte de remover el veneno de serpiente a través de mantras. El puede remover el veneno de mi nuera.” (28)
Jațilā entonces pregunto a Śrī Rādhā, “Nuera, que estas sintiendo ahora?” “Oh Suegra,” Śrī Rādhā contesto, “todo lo que se es que Mi cuerpo esta ardiendo con el veneno. No se mas que eso y no puedo decir nada mas. Pero, si cualquier hombre erudito que sepa mantras toca uno de Mis dedos, inmediatamente dejaré este cuerpo. Soy una casta esposa y Mi voto de castidad es firme.” (29–30)
snușe! kim evaḿ vadasīha bhakșayed abhakșyam aspŗśyam api spŗśen naraḥ mantraușadhādau na hi dūșaņam bhaved āpad-gatasyeti vidāḿ śruti-smŗtī (31)
“Mi querida nuera, no hables así. En una emergencia, una persona virtuosa podría comer algo que ordinariamente esta prohibido o tocar algo que el normalmente no tocaría. Cuando el peligro amenaza, no hay falta en usar mantras u otros remedios. Esta es la prescripción de aquellos eruditos en las escrituras.” (31)
ājṣāḿ tavemāḿ na hi pālayāmi praņān pura-sthe kalaya tyajāmi śrutveti vadhvā vacanaḿ sa-cintāḿ jagāda kācit prativāsinī tām (32)
yaḥ kāliyāghādi-bhujańga-marddī dŗșțyaiva tāḥ pīta-vișodakā gāḥ ajīvayat taḿ harim ānayārye! sa te vadhūḿ nirvișayed vilokya (33)
Śrī Rādhā contesto, “Por favor Escuchame. Yo abandonaré Mi vida ahora, ante tus ojos. Soy incapaz de obedecer sus ordenes en cualquier circunstancia.” Cuando Jațilā escucho esto de su nuera, se lleno de excesiva ansiedad. En ese momento un vecino llego y le advirtió, “Estimada noble dama, usted debería llamar a Śrī Hari. El fue quien subyugo a las poderosas serpientes Kāliya y Agha. Y con la mirada regreso a la vida a las vacas que habían muerto por beber el agua envenenada de Kāliya-hrada. El puede remover el veneno sólo con mirar a su nuera.” (32–33)
rādhābravīd yat parivāda-pīḍāḿ vișānalād apy adhikām avaimi tam eva yā darśayituḿ yatante tā vairīņīr eva cireņa vedmi (34)
Oyendo esto por casualidad, Śrī Rādhā dijo, “El dolor causado por las falsas acusaciones que yo he sufrido respecto a ese Kŗșņa es mas doloroso que este ardiente veneno. Quienquiera que trate de traerlo cerca de Mi es mi enemigo de por vida.” (34)
“Escucha,” Jațilā dijo a Śrī Rādhā, “junto con Kuțilā iremos a ver rápidamente a Paurņamāsī. Ella esta bien versada en las escrituras tantrica y āgama, y conoce excelentes mantras para curar mordidas de serpientes. Ella vendrá y Te curara. Ahora, Tu no debes objetar esto.” (35)
proce viśākhā tad alaḿ vilambair vișaḿ mayāruddham avaihi sūtraiḥ yamārddha-paryantam ataḥ parantu śiro ‘dhirūḍhaḿ tad asādhyam eva (36)
Viśākhā dijo, “Noble dama, esta es una excelente idea. Por favor no te demores! Rápidamente ve. Ataré una cuerda alrededor de la cintura de Rādhā para evitar que se propague el veneno a través de Su cuerpo, pero este solo es efectivo por una hora y media. Una vez que el veneno alcance Su cabeza nada la salvara.” (36)
kiḿ putri! sākhyan na hi vedmi kiñca kanīyasī me bhaginī tu vetti kva sā kim ākhyā kila kin nivāsā kāŚī-purāt sā śvaśurasya gehāt (38)
pitur gŗhaḿ vŗșņi-pūre gatā ’bhūt tato ’pi mām atra didŗkșamānā pūrvve dyur evāgamad asti nāmnā vidyāvalir mad-gŗha-madhya eva (39)
Jațilā inmediatamente fue con Paurņamāsī, ofreció sus respetos, y le dijo a ella lo que había sucedido. Paurņamāsī voltió hacia la hija de Gargācārya, Gārgī, y le pregunto, “O Mi hija, tu haz aprendido el arte de recitar serpiente-mantras de tu padre?” “No, no lo hecho,” Gārgī contesto, “pero Mi hermana menor lo ha hecho.” “Cual es el nombre de tu hermana menor?” pregunto Paurņamāsī. “Donde vive ella, y donde esta ella ahora?” “Su nombre es Vidyāvali,” contesto Gārgī. “Ella vive con la familia de su esposo en Kāśīpura. Por el momento ella esta visitando la casa de sus padres en Mathurā, y me visito ayer. Justamente esta en mi casa ahora.” (37–39)
Cuando la vieja Jațilā escucho esto, volvió su rostro con lágrimas hacia Gārgī y ansiosamente le dijo, “Oh Gārgī, caigo a tus pies. Por favor ven a nuestra casa con tu hermana, y comprame a mi y a mi hijo con la caridad de tu nectárea misericordia.” (40)
“Gārgī,” le dijo a Paurņamāsī, “Primero, ve a tu casa, y Jațilā y Kuțilā irán después. Si son capaces de complacer a Vidyāvali y llevarLa a su casa, Rādhikā inmediatamente será liberada del efecto del veneno.” (41)
Por la mañana de ese día, Dhanișțhā hablo con Gārgī para que vistiera a Śrī Kŗșņa bellamente como una mujer. Gārgī habiéndolo hecho y llevándolo a Él a su casa, no vio la necesidad de ir ante Jațilā. En común acuerdo, ellas fueron a su casa, donde Gārgī vistió a Śrī Kŗșņa, quien estaba disfrazado de una bella mujer. (42) vidyāvale! bho bhagini! vraje ’smin yā nitya-rājad-guņa-rūpa-kīrttiḥ tvayā śrutā Śrī-vŗșabhānu-putrī tasyā vipattim arhatī batādya (43)
“Hermana Vidyāvali, Tu haz eschuchado del nombre de Śrī Vŗșabhānu-nandinī. Ella es famosa a través de Vraja y Ella esta dotada con todas las buenas cualidades. Hoy una gran calamidad ha caído sobre Ella. Fue mordida por una serpiente enjoyada y ahora Su cuerpo esta lleno con su veneno. Es por lo que Su suegra y cuñada, Kuțilā, han venido a verte. Tu debes ir con ellas a su casa de una vez.” (43–44)
“Oh! hermana,” contesto Vidyāvali, “Tu eres erudita, y mas aún hablas como una persona ignorante. Ay!, ay!, Soy una casta y pura mujer, y también la esposa de un brāhmaņa, pero de acuerdo contigo, Soy entendida en el incivilizado arte de encantar serpientes. (45)
pituḥ kulaḿ vŗșņi-pūre ’sti patyuḥ kulan tu kāśyāḿ prathitaḿ nŗ-loke kalańka-pańkena nimajjayantī māḿ tvaḿ kathaḿ snihyasi tan na budhye (46)
“Por favor escuchaMe. La familia de mi padre es renombrada en Mathurā, y la familia ilustrosa de mi esposo es preeminente en Kāśī. Quien en este mundo no ha escuchado de esas dos familias? No puedo entender como tu puedes lanzar a tales nobles linajes al lodo de la infamia. Es como tu muestras tu afecto?” (46)
La vieja Jațilā entonces se dirigió a Vidyāvali, diciendo, “Ofrezco mis respetos a Tus pies. Si restauras la salud de mi nuera Tu me compraras y a mi hijo con el polvo de tus pies de loto. Que mas puedo decir? ” (47)
vidyāvaliḥ prākhyad ayi vraja-sthe jānāsi na brahma-kulasya rītim gŗhaḿ gŗhaḿ gopya iva bhramanti na vipra-vadhvaḥ su-mahābhijātyāt (48)
provāca gārgī śŗņu bho śruti-smŗti- proktaḿ nișiddhaḿ vihitaṣ ca yad bhavet jṣātvāpi tat sarvam idaḿ bravīși na te ’sti dŗșțiḥ kila pāramarthikī (49)
“Anciana de Vraja,” contesto Vidyāvali, “no estas consciente de la tradición de nuestra familia brāhmaņa. Las esposas de los brāhmaņas no van de casa en casa como las vaqueras, debido a la nobleza de su exaltado linaje familiar.”
Mientras tanto Gārgī le hablo a Vidyāvali, “Hermana, Estas bien versada en los estándares y prohibiciones dadas en los Śrutis y Smŗtis, mas aun Tú antepones opiniones acerca de la castidad y la familia. Esto muestra que Tú no tienes una visión trascendental. (48–49)
vraje sthitāḥ kīrtti-dayānvitā yā gopyas tathā ye vŗșabhānu-tulyāḥ gopā na teșāḿ tvam avaiși tattvaḿ nāpy ābhijātyaḿ na ca vișņu-bhaktim (50)
“Y escúchame, las gopīs de Vraja están dotadas con cualidades altamente respetables, tal como la fama y compasión, y los gopas son iguales a Vŗșabhānu Mahārāja. Tú no entiendes algo de su verdadera naturaleza, Su linaje familiar y su devoción por el Señor Vișņu. (50)
kāśyāṃ sthitā viṣṇu-bahirmukhā ye viprā bhavatyāḥ śvaśurādayas tān jānāmi no vācaya māṃ taveyaṃ kāśyāṃ sthiter buddhir abhūt kaṭhorā (51)
“Conozco todo acerca de aquellos brāhmaṇas de Kāśī, especialmente Tu familia por parte de tu esposo. Todos están contra el Señor Viṣṇu. No me digan mas de ellos. Desde que te fuiste a Kāśīpura, tu enfoque se volvió tan duro como el de ellos.” (51)
mā kupya śāntiṃ bhaja tāvad ārye bhaginy ahaṃ te hanta tavāśritā ’smi yathā bravīṣy evam ahaṃ karomi kintv atra śańkā mama kācid asti (52)
“Buena hermana, por favor no te enojes conmigo,” declaró Vidyāvali. “Tranquilizate. Completamente depende de ti. Yo debería de hacer todo lo que tú me pidas, pero a este respecto tengo una gran aprensión. (52)
pure śrutā kācana kiṃ vadantī nandasya putro ’jani ko ’pi vīraḥ sa svaira-caryyo bata lampaṭatvān na brahma-jāter api bhītim eti (53)
“En Mathurā he escuchado un rumor de que Nanda Mahārāja tiene un poderoso hijo, quien es obstinado y licencioso, y quien no respeta aun a los brāhmaṇas. (53)
atretya nārīṣv iva mayy api drāk sa lobha-dṛṣṭi yadi vartmani syāt sadyas tadāsūn visṛjāmi naiva kula-dvayaṃ hanta! kalańkayāmi (54)
“Si, Cuando iba por el camino, Él de pronto me miro con la misma mirada lujuriosa que lanza sobre todas las mujeres de Vraja, Yo inmediatamente abandoné mi vida. Ay, yo no puedo dejar que caiga en desgracia a mis dos aristocráticas familias.” (54)
na tatra śańkā tava kāpi yasmād ahaṃ svayaṃ tvat-sahitā prayāmi ity eva gārgyā vacanāc calantī vidyāvalir vartmani kiñcid ūce (55)
“Mi querida hermana,” dijo Gārgī, “no hay necesidad de preocuparse, viajaré yo misma Contigo.” Vidyāvali entonces accedió, y Ella y Gārgī se pusieron en camino para la casa de Jaṭilā junto con las demás. En el camino Vidyāvali hablo con Jaṭilā: (55)
mantrauṣadhābhyāṃ garalasya nāśas tatrāsti mantro mama kaṇṭha eva yac cauṣadhaṃ tat tv ahi-valliparṇaṃ mantraṃ japantyā rada-piṣṭam eva (56)
tat te vadhūḥ sā mama bhakṣayet kiṃ na vetti pṛṣṭā jaṭilā jagāda sā me snuṣā brāhmaṇa-jāti-bhaktā tad bhakṣayed eva kim atra citram (57)
provāca gārgī na kilauṣadhādāv abhakṣya-bhakṣyasya bhaved vicāraḥ tatrāpi bhūdeva-kulasya śeṣaṃ rājā ’pi bhuńkte kim utānya-jātiḥ (58)
“Por favor escuchame. El veneno de la serpiente sera removido por mantras y medicamentos. Los mantras están en mi garganta y el medicamento es la tāmbūla que yo masticaré, la cual estará santificada por mantras en mi garganta. Buena mujer, tu nuera accederá a tomar el medicamento?” “Mi nuera es muy obediente a los brāhmaṇas,” contesto Jaṭilā. “Por supuesto que Ella comerá tu tāmbūla masticada. No hay duda de ello.” “Cuando se trata de medicina,” menciono Gārgī, “No hay consideración al respecto de que es comestible y que no lo es. Aun un gran emperador que gobierna a otros reyes toma los remanentes de los brāhmaṇas, que decir de aquellos de las demás castas.” (56–58)
Vidyāvali pronto llego a la casa de Jaṭilā. Cuando Ella entro, Jaṭilā y Abhimanyu bañaron Sus pies. Entonces Jaṭilā fue con Śrī Rādhā y esparció el agua del baño sobre Su cabeza, ojos, boca y pecho. (59)
proce snuṣe! kāpi mahānubhāvā gargasya putryāgamad atra bhāgyāt sā susthayiṣyaty acireṇa vijñā mantrais tvad-ańgāni muhuḥ spṛśantī (60) kiñcāhi-vallī-dala-vīṭikāñ ca sañcarvavya dantaiḥ paṭhitaiḥ sva-mantraiḥ nidhāsyate tan-mukha eva tatra ghṛṇā na kāryā śapatho mamātra (61)
Jaṭilā le dijo a Śrī Rādhā, “O nuera, por alguna gran fortuna, Ésta noble alma, la hija de Gargācārya justamente ha llegado. Es experta en la ciencia de remover veneno. Tocará todos Tus miembros mientras canta mantras, y muy pronto Te volverás saludable. Una cosa mas, será preparada por Ella para colocar en Tu boca, tāmbūla masticada que ha sido santificada por mantras. Por favor no Objetes al respecto.” (60–61)
Cuando Vidyāvali entró en el cuarto de Śrī Rādhā, Ella vio que el cuerpo de Rādhā estaba cubierto con ropa desde la cabeza a los pies. Ella le dijo a Jaṭilā, “Vieja mujer, remueve la ropa que cubre el cuerpo de tu nuera. Necesito mover Mis manos sobre Su cuerpo, comenzando desde Sus pies, mientras canto un mantra para curar la mordedura de serpiente. Mis manos detectarán que partes de Su cuerpo a alcanzado el veneno, y cuando Mis manos lleguen a esos lugares, Repetiré mantras que removerán el veneno.” (62–63)
Jaṭilā removió la ropa, y Vidyāvali comenzó a mover Sus manos sobre Śrī Rādhā. Comenzó con Sus pies, gradualmente se movió hacia arriba de Su cuerpo. Cuando alcanzo los pechos de Śrī Rādhā, Ella no avanzo mas, pero mantuvo ambas manos sobre ellos cuando Ella canto la invocación a Gāruḍa una y otra vez. (64)
vidyāvaliḥ prākhyad aho kim etad viṣaṃ na śāMiet karavai kim atra vṛddhā ’bravīt svāsyata auṣadhaṃ tadāsye snuṣāyāḥ kṣipa bhojayāmum (65)
Vidyāvali viró hacia a Jaṭilā y dijo, “Vieja mujer, algo esta mal! El veneno no esta saliendo. Que debería hacer ahora?” Jaṭilā contesto, “Amablemente toma algo de la medicina masticada de tu boca y ponla en la Suya, y ve lo que pasa.” (65)
sarvā bahir yāta-gṛhaṃ kavāṭenāvṛtya sarpasya japāmi mantram muhūrtta-mātreṇa tam eva sarpam āhūya tenāpi sahālapāmi (67)
cintā na kāryā tila-mātry api drāk sañjīvayiṣyāmi vadhūṃ tvadīyām ekāgra-cittā ghaṭikā-trayānte mantraṃ prajapyākhilam īkṣayāmi (68)
“Pondré esa medicina purificada en Su boca,” Vidyāvali dijo, “pero Ella continua temblando y respirando profundamente. Ella esta aun amarilla con el veneno. Debería de cambiar el tratamiento. Todos ustedes salgan del cuarto. Pondré el seguro a la puerta y recitaré un mantra convocar a la serpiente que mordió a su nuera. La serpiente llegará en un momento y hablará conmigo. No se preocupen en lo mas mínimo; Yo reviviré muy pronto a su nuera. Después estaré recitando este mantra con la mente enfocada por tres horas Les mostraré los resultados.” (66–68)
gārgī-girā tā yayur anya-gehaṃ muhūrttataś cāyayur apy athātra vidyāvaler vācam aheś ca gopyo gṛhāntare bhoḥ śṛṇutety athocuḥ (69)
Por la advertencia de Gārgī todos fueron al otro cuarto, y después ellas regresaron al patio externo del cuarto de Śrī Rādhā. Las gopīs, quienes tenían conocimiento de la verdadera identidad de Vidyāvali, hablaron dentro del alcance del oído de Jaṭilā y Kuṭilā, “Acérquense,” ellas dijeron, “escuchemos la conversación entre Vidyāvali y la serpiente.” (69)
svara-dvayenaiva jagāda kṛṣṇo yat tat tu sakhyaḥ sahasā ’vajagmuḥ yāḥ kautukānanda-samudrayor drāg āvartta-magnāḥ su-bhṛśaṃ virejuḥ (70)
bho sarpa-rājātra kutas tvam āgāḥ kailāsataḥ kasya nideśa-kṛt tvam? candrārddha-mauleḥ sa ca kīdṛśo ’bhūd bhuńkṣvābhimanyuṃ jaṭilā-sutaṃ drāk (71)
Śrī Kṛṣṇa fingió dos diferentes voces: la de Vidyāvali y la de la serpiente. Las sakhīs, quienes entendieron todo, estaban inmersas en alegría, atrapadas en un remolino en el océano de festiva bienaventuranza y relucientes en éxtasis. Con la voz de Vidyāvali, Śrī Kṛṣṇa pregunto, “O rey de las serpientes, de donde haz venido. ?” Con la voz de la serpiente, El contesto, “Desde Kailāśa.” “Cual es la razón por la que haz venido?” “Candrārdhamauli[1] Śiva me ordenó venir aquí.” “Cual fue su instruccion?” “Morder al hijo de Jaṭilā, Abhimanyu.” (70–71)
aghaḥ kim etasya, na kiñca kintu tan-mātur evāsty aparādha-yugmam sā kiṃ na daṣṭā, garalānalād apy apatya-śokāgnir atīva-tīvraḥ (72) tayā ’nubhūto bhavatu pragāḍham ity etad arthaṃ na hi daśyate sā tyaktvā ’bhimanyuṃ katham asya jāyā daṣṭā ’tra sādhavya-vara-pradānāt (73) durvāsasāsau prathamaṃ na tasmād daṣṭaḥ sa daṣṭavya iha prabhāte putrasya vadhvāś ca yathā ’tiśoke jājjvalyate sā nikhilaṃ svam āyuḥ (74)
“Cual es el crimen de Abhimanyu?” Vidyāvali pregunto. “El no ha cometido alguna ofensa,” contesto la serpiente. “Pero su madre ha cometido dos.” “Entonces porque no muerdes a la madre de Abhimanyu?” “Porque Jaṭilā experimentará un mayor ardor cuando ella llore a su hijo de lo que lo haría a través del fuego de mi veneno,” contesto la serpiente. “Esa es la razón por la que no la mordí.” “Entonces por que tu mordiste a la esposa de Abhimanyu en lugar de él?” inquirió Vidyāvali.
La serpiente explico: “Durvāsā, el mejor de los sabios, ha dado la bendición de saubhāgyavatī a Śrī Rādhā, la joya cúspide de las castas damas. Por que el le ha dado a Ella esa bendición – ser una mujer cuyo esposo esta vivo–Abhimanyu no puede morir mientras que Ella permanezca viva. La bendición de Durvāsā y la castidad de Śrī Rādhā son extremadamente muy poderosas. Eso es por lo que no puedo matar a Abhimanyu sin primero morder a Śrī Rādhā y matarla. Hoy mordí a Śrī Rādhā, y mañana Morderé a Abhimanyu. El resto de la vida de Jaṭilā estaría llena de temor sufriendo cuando ella se lamente por su hijo y su nuera.” (72–74)
kiṃ hanta tasyāḥ aparādha-yugmaṃ durvāsasi śrīla-hara-svarūpe kaṭākṣa eko’sty aparan tu śambhor ya iṣṭadevo harir asya cāṃśe (75) nandātmaje ’līka mahāpravādas tad-bhojane bādha-karaḥ sva-vadhvāḥ nirodhatas tan-nija-kanyayā sā sārddhaṃ vraje roditu sarva-kālam (76)
Vidyāvali entonces pidió, “Por favor diMe, cuales son los dos crímenes de la vieja Jaṭilā?” La serpiente contestó, “La primera ofensa de Jaṭilā fue difamar al sabio Durvāsā, quien es una manifestación del Señor Śiva mismo. La segunda ofensa fue acusar falsamente al hijo de Nanda Mahārāja, quien es la fuente de Śrī Hari, la deidad adorable del Señor Śiva. Por confinar en su cuarto a Su nuera, Jaṭilā ha creado un obstáculo para que Nanda-nandana Śrī Kṛṣṇa obtenga Sus alimentos. Debido a estas dos ofensas, Jaṭilā y su hija Kuṭilā lloraran en lamentación por Śrī Rādhā and Abhimanyu por el resto de sus vidas aquí en Vrajamaṇḍala.” (75–76)
vadhūṃ na rotsyāmi kadāpi seyaṃ prayātu nandasya puraṃ yatheṣṭam sambhojayitvaiva hariṃ prakāmaṃ paktā punar mad-gṛham etu nityam (78) Cuando la vieja Jaṭilā escuchó esto, comenzó a llorar fuertemente. Gritó gritó afligida: "¡Ay, ay, oh hijo mío, oh nuera, que eres mi ¡aire de vida! ¿Nunca más los oiré recibir la bendición: 'Que vivan los dos por mucho tiempo"? Entonces imploró a Vidyāvali: "Oh Vidyāvali, me me rindo a Tus pies. Por favor, satisface de algún modo a este rey de las serpientes. A partir de ahora, nunca impediré que mi nuera vaya diariamente a la casa de Nanda Mahārāja a cocinar para Śrī Kṛṣṇa. Ella es libre de ir según su deseo. Sólo regresará a casa cuando haya cumplido con todas sus obligaciones allí. (77-78)
“O Durvāsā, el mejor de los sabios! Te ofrezco mis reverencias a tus pies cientos y cientos de veces. Yo te oro que por favor olvides mi ofensa. Yo estoy vieja, débil de mente y loca desde nacimiento. (79)
“La mente de mi hija Kuṭilā ha sido siempre malévola y retorcida. El carácter de Śrī Rādhā y su disposición son virtuosos, pero mi hija le ha causado tanto sufrimiento sin razón.” Escuchando las palabras de su madre, Kuṭilā cayó al suelo para ofrecer respetos a la serpiente. “O rey de las serpientes, por favor perdóname. Por favor se amable y no muerdas a mi hermano. Yo jamas haré alguna acusación en contra de Rādhā, y jamas evitaré que Ella salga de la casa. Desde ahora Ella puede ir a cualquier lugar que Desee con sus sakhīs.” (80–81)
El rey de las serpientes dijo, "O gopīs, escuchen cuidadosamente mis palabras. Yo juro por el Señor Śambhu que Śrī Rādhā es una esposa virtuosa y casta. O Jaṭilā, confiaré en ti solamente si aceptas esto como un hecho y juras sobre la cabeza de tu hijo." (82)
tvad-ukta itthaṃ śapathaḥ kṛto ’yaṃ vadhūṃ na rotsyāmi kadāpy ahīndra! snuṣā ca putraś ca cirāya jīvatv imaṃ varaṃ me kṛpayā prayaccha (83)
Al oír esto, Jaṭilā puso su mano en la cabeza de su hijo e hizo el juramento. Ella entonces dijo, "rey de las serpientes, tengo fe completa en sus palabras. Yo nunca confinaré de nuevo a mi nuera dentro de la casa. Concedeme por favor tu misericordia sobre mí bendiciendo a mi hijo y nuera con una larga vida." (83)
bāḍhaṃ prasanno ’smi jaraty ayi tvaṃ durvāsasaṃ pūjaya bhojayasva rādhāńgataḥ svaṃ garalaṃ gṛhītvā vrajāmi kailāsam ito ’dhunaiva (84) kṛṣṇa-pravādaṃ yadi te snuṣāyai dadāsi dehy atra na me ’sti kopaḥ ruṇatsi tāṃ cet sahasāgatas te vadhūñ ca putrañ ca ruṣā daśāmi (85)
La serpiente entonces dijo, "Que así sea. Estoy satisfecho totalmente con usted, vieja señora. Usted debe también adorar al sabio Durvāsā y ofrecerle buen alimento. Ahora retiraré el veneno del cuerpo de Śrī Rādhā y regresaré a Kailāśa. Si usted lo desea, puede acusar falsamente a su nuera de tener cierta relación con Śrī Kṛṣṇa; No estaré enojado con usted por eso. Pero a partir de este día en adelante, si usted Le prohíbe ir aquí y allá, Me enfureceré e inmediatamente morderé a su hijo y a su nuera, quienes morirán." (84 –85)
Después de eso, la voz de Vidyāvali exclamó alegremente, " O gopīs, ahora ustedes pueden ser supremamente dichosas. La serpiente ha quitado el veneno y ha desaparecido, y Vṛṣabhānu-nandinī esta totalmente Aliviada."(86)
Ellas abrieron la puerta y entraron en el cuarto. " Rādhā," preguntaron, "cómo te sientes ahora?" "Me siento bien," ella contesto. "no siento más ninguna sensación ardiente." (87)
Cada una se inclino respetuosamente a los pies de Vidyāvali y exclamaron, "¡O Vidyāvali, todas las glorias a usted! Usted ha ganado créditos piadosos ilimitados al restaurar la vida de Śrī Rādhā, y Su vida se ha convertido totalmente auspiciosa." (88)
lalāga karṇe kuṭilā jaratyaḥ sā prāha kanye kim idaṃ bravīṣi ekena hāreṇa kim adya sarvālańkāram asyā adhunaiva dāsye (89)
Kuṭilā susurró al oído de Jaṭilā', "madre, dale la gargantilla de Śrī Rādhā a Vidyāvali como recompensa." "Que dices, Kuṭilā?" Jaṭilā respondió. ¿"Por qué solamente la gargantilla? Le daré toda joyería de Śrī Rādhā." (89)
"Nuera," Jaṭilā dijo, "con el corazón feliz adorna a Vidyāvali con todos Tus ornamentos. Tu madre Vrajeśvarī Śrī Yaśodā muy pronto Te dará muchos nuevos." (90)
vidyāvale! mac-chapatho na neti mā brūhyato maunavatī tava tvam tatas tu rādhā paridhāpayantī bhūṣāmbarādi-svagataṃ jagāda (91)
"Vidyāvali, mi nuera le adornará personalmente con estas decoraciones. Aceptarlas por favor para mi beneficio; no digas que no Puedes aceptar estos regalos." Śrī Rādhā procedió a utilizar Sus ropas, ornamentos, etc. para adornar a Śrī Kṛṣṇa, que estaba disfrazado como Vidyāvali. Cuando Ella lo hizo, comentó: (91)
yo māṃ sakhīnāṃ purato ’pi naiva śaśāka sambhoktum ayaṃ priyo me śvaśrvā nanānduś ca samakṣam eva māṃ nirvivādaṃ sama-bhuńkta bāḍham (92)
“Mi querido y Yo no podemos disfrutar delante de Mis sakhīs, aunque sean cercanas a Mí como Mi propia alma; mas aun Hoy Él lo ha hecho libremente para contento de Su corazón, delante de Mi suegra y cuñada! (92)
vāmyañ ca karttum mama nāvakāśo ‘bhūvaṃ paraṃ kevala-dakṣiṇaiva kintv adya vāñchā januṣo ’py apūri tac-carvitaṃ bhuktam aho muhur yat (93)
"Hoy no tuve ninguna oportunidad de exhibir Mi naturaleza contraria (vāmya-bhāva); Solo podría permanecer en un humor sumiso (dakṣiṇabhāva). Pero que así sea. Hoy, el deseo que he llevado nacimiento tras nacimiento se ha cumplido, porque hoy, he degustado en varias ocasiones la tāmbūla masticada por Mi querido. (93)
pāde nipatyaiva madīya-kāntam ānīya sākṣāt samabhojayan mām vadhūṃ tad asyāś caraṇe nanānduḥ śvaśrvāś ca me bhaktir avicyutā ’stu (94)
"Por un tiempo prolongado He considerado a mi suegra y cuñada ser mis enemigos, pero hoy ellas han traído al amado de mi vida a nuestra misma casa. Se han agachado y han adorado Sus pies, y se han vuelto la causa de Su reunión y el goce abiertamente conMigo. Debido a esto, ruego para tener firme devoción a sus pies. (94)
sambhoga-paścād api tan-nideśāc chṛńgāvayāmi priyam agrato ’pi asyā aye dhanya vidhe numas tvāṃ vṛttaṃ tavaitat kva nu varṇayāmi (95)
"Hoy Nos hemos encontrado el uno con el otro, y ahora estoy adornando a Mi amado Prāṇa-vallabha directamente delante de Mi suegra; ¡y por su orden también! ¡Oh Providencia, eres bendita! Le ofrezco mi homenaje y canto sus glorias. Donde y a quién podría yo narrar posiblemente este incidente que fue orquestrado por Usted?" (95)
vidyāvalīḥ prāha bhaginy ataḥ kim ārye! tvad-ājñāṃ karavai vadaitat yā vo gṛhaṃ śīghram ataḥ paran tu rātrir niśīthād api hy adhikā ’bhūt (96)
"Noble Jaṭilā," dijo Vidyāvali, "ya es mas de media noche. Por favor dinos lo que quieras que hagamos. Si Tu no tienes más instrucciones, mi hermana y yo regresaremos rápidamente a casa." (96)
La vieja Jaṭilā dijo, "Gārgī y Vidyāvali, ¿cómo pueden volver a su hogar en mitad de la noche? Porqué no felizmente descansan en nuestra casa esta noche?" (97)
jagāda gārgī jaṭile! tvad-uktam avaśyam etat karavāva bāḍham na yāti cittād viṣa-śeṣa-gandhasambhāvanā me khala-sarpa-jāteḥ (98)
Gārgī contesto, "Obedeceré ciertamente tus palabras, porque un rastro de ese engañoso veneno de serpiente todavía permanece en nuestros corazones y no ha sido disipado totalmente. Cuando alguien ha sido mordido por esta serpiente negra, su fiebre puede parecer que ha bajado al principio, pero hay posibilidad que pueda elevarse otra vez. Es necesario que el paciente permanezca cerca de quién es erudito en mantras. " (98)
provāca bāḍhaṃ jaṭilā sa-kanyā tad adya vadhvā saha puṣpa-talpe ekatra vidyāvalir iddha-mantrā sukhaṃ balabhyāṃ svapitu prakāmam (99)
Kuṭilā y Jaṭilā dijeron, "Que así sea. Dejen que Vidyāvali, quien Es la erudita en mantras, descanse felizmente junto con Śrī Rādhā en la cama de flores adentro del cuarto en la azotea." (99)
iddaṃ vilāsa-rasikau rata-sindhū cāru hillola-khelana-kalāḥ kila tena tuṣṭau premābdhi-kautuka-mahiṣṭha-tarańga-rańge sakhyaḥ sukhena nanṛtur na virāmam āpuḥ (100)
Śrī Rādhā y Śrī Kṛṣṇa son muy expertos en realizar pasatiempos divinos. Las actividades juguetonas, ingeniosas, artísticas que Ellos manifiestan son olas magníficas en el océano del amoroso amor puro, espiritual. Las sakhīs también bailan incesantemente en esta arena en las ondas del dichoso océano de prema. (100)
[1] “Aquel que porta una media luna sobre su cabeza.”